Hace poco leí un libro que me dejó un gran aprendizaje, de hecho creo que cada momento de la vida está lleno de aprendizajes pero me he preguntado porque la mayoría de las personas se incomodan o incluso a algunos les es molesto cuando escuchan la palabra SEXO, ése libro abrió totalmente mi panorama respecto a ese tema, si tienes oportunidad de leerlo te lo recomiendo muchísimo se llama «El libro del Sexo» del filósofo hindú Osho, gracias a él y a la experiencia que he adquirido con el tiempo ahora entiendo no es culpa mía ni tuya, la culpa remonta hace siglos con nuestros antepasados en donde generación tras generación nos han hecho creer que el sexo es malo y es algo prohibido, es por eso que vivimos en una sociedad reprimida.
La religión y la misma cultura de cada país han llenado a la sociedad de tabúes, de sexo lujurioso y conocimiento distorsionado respecto al tema. Estamos viviendo una revolución en las relaciones en donde es difícil de creer que realmente hay un problema de represión en este mundo virtual donde tienes acceso a todo tipo de información pero que ahora están surgiendo nuevos problemas que generan un abismo entre las expectativas de las parejas al momento de las relaciones sexuales gracias a la pornografía, que lo ha vuelto todavía más prohibido y cada vez hay más confusión ya que ni siquiera hemos podido profundizar en el verdadero significado con lo cual vivimos limitando nuestra propia sexualidad.
El sexo es el acto donde tú y tu pareja unen sus cuerpos para convertirse en uno solo siendo la manera más íntima de relacionarnos, ya sea a nivel físico haciendo el amor con la magnificencia de la creación dando vida a un nuevo ser o en un nivel energético, porque como sabes todo lo que se mueve en este universo es a través de energía desde la formación de las moléculas, los procesos biológicos de tu cuerpo hasta la atracción que sientes por esa persona.
Entonces ¿Crees qué el sexo es malo?, yo creo que podría ser malo cuando no te gusta practicar alguna actividad sexual, te incomoda o te lastima, pero si hay la confianza y la apertura para decir lo que te gusta y lo que te desagrada, no tiene que ser malo, tiene que ser orgásmico, fascinante y poderoso.
Es tiempo de que vivas el amor y el sexo en completa libertad, sin miedos ni tabúes disfrutándolo desde esa otra perspectiva para poder llenarte de verdadero placer. Si tenemos la apertura en cuanto al sexo las nuevas generaciones crecerán una sociedad mejor. ¿No crees?